Anoche fue un día de fiesta. La redacción al completo fuimos al cine. Los tres juntos de la mano para disfrutar de una buena película. Cual cowboys galopando hacia el amanecer nos plantamos delante de la cartelera para pensar qué película podría resultar más interesante. Tras enjuagarnos la boca con el mejor de los coñacs, ajustarnos el monóculo y atusarnos el sombrero de copa, nos decidimos por la nueva película de Rupert Sanders y protagonizada por Scarlett Johansson.
Dejando de lado la parafernalia literaria, íbamos con bastante flojera respecto a este metraje. Como una tollina de padre nos la veíamos venir, y teníamos la ligera sensación de que no nos íbamos a plantar frente a la película que revolucionará los Óscars en 2018. Pero bueno, ya sabéis que vemos de todo y que lo que nos gusta es el cine, en general, así que sacamos las entradas y accedimos a la sala. Por supuesto, como buen jueves fuera de la "Fiesta del cine" estábamos 4 gatos sentados esperando a la proyección.
Antes de que empezara ya habíamos hecho los deberes. La película es una versión filmada de un anime que, como no podía ser de otra manera, proviene de un manga. Algunos ya nos habíamos visto la serie y sus OVAS hace ya unos cuantos años, y otros un poco in extremis unas horas antes, así que ya sabíamos a lo que veníamos. Cabe decir que esta saga, este universo, es en el que se inspiraron las ahora Hermanas Wachowski para la creación de la saga Matrix. Una vez situados, vamos al tema.
La película tiene un guión muy visto: el cyborg que busca su identidad y que, tras sufrir una de crisis de identidad llega a un checkpoint que puede dar lugar a secuelas. Pero que nadie se desaliente desde el principio. El ambiente futurista, totalmente cyberpunk, los personajes extraídos de la saga, que a pesar de estar poco desarrollados en la película mantienen en su esencia, y la estética general, hacen que nos interesemos más y más por este nuevo mundo, por este futuro distópico que se nos va presentando poco a poco.
En el apartado técnico, los efectos especiales son espectaculares y han sabido llevar a la gran pantalla un tema que, a la hora de adaptar dibujos japoneses, en ocasiones se queda flojo. Y es el detalle, los primeros planos y el posicionamiento de cámara respecto al resto de películas de acción, que le dan el toque futurista que la película pedía a gritos.
Y ya que tratamos el tema de la acción, cabe destacar que tampoco es que tenga unas escenas de acción espectaculares, y que para más inri en ocasiones pecan de ser lentas y predecibles. Pero parece que se han querido centrar en el trasfondo del mundo del futuro que se nos presenta y dejar de lado los tiros y las patadas para la sobrecarga de películas de superhéroes y sus secuelas que se pueden ver hoy en día en cartelera. Destacar las escenas de hackeo, que dejan de lado el elemento digital y se centran en el humano, representando físicamente las consecuencias digitales. Espléndido.
En cuanto al casting, destacamos la aparición del mítico Takeshi Kitano como Arakami/Beat, que a sus más de 70 años sigue repartiendo estopa en el momento menos esperado. Johansson cumple la función en su papel de Mayor, a pesar de que más de uno pensemos que un personaje asiático hubiera encajado más en este papel. Pero de haber sido así probablemente ni podríamos haber visto esta película en una sala de cine ni estaríamos haciendo esta crítica. Bienvenidos a Hollywood.

![]() ![]() |
Una película de acción futurista que, a pesar de no ser de las más desatacadas de su género, puede satisfacer paladares exigentes. Recomendable el visionado de la saga en la que se basa, no tiene desperdicio.
|
![]() ![]() |
Difícil adaptación, con un resultado más que decente. Es cierto que la conclusión del anime la desvelan desde su primera escena, pero estamos hablando de un blockbuster para el consumo de masas y el guión tiene que ser accesible desde un principio. Tampoco estamos ya en 1995, es una idea muy sobada y el resultado final no sería sorprendente a estas alturas. Habla un servidor que se ha visto el anime unas horas antes. Lo más positivo: su ambientación cuidada y rica en todo tipo de detalles, bebe mucho del clásico Blade Runner, pero es un añadido a la original que le queda como anillo al dedo. La acción es potente y excelentemente ejecutada aunque diré que pierde esencia el omitir la sangre, pero claro, a cuanta más gente llegue más bolsa hago. Como aspecto negativo tendré que decir que el guión lo componen varias tramas, mal estructuradas; en mi opinión con una sola hubiera valido. Esto no quiere decir que la película acabe siendo mala, es más, se la recomiendo a todo amante de la ciencia ficción. Sin demasiada expectativa se deja ver muy bien.
. |
![]() ![]() |
Me he quedado sorprendido con esta película. Pensaba que iba a ser un nuevo jalón en esa ya larga cadena de apropiación por parte del mainstream de un producto minoritario al que, tras vaciarle de contenido y ponerle una flamante carcasa exterior, exhiben sin ningún pudor en pases para todos los públicos. Y algo de eso hay, ojo. Pero el resultado hay que reconocer que es bastante espectacular. La estética y ambientación están muy cuidadas, logrando sumergir al espectador en ese mundo masificado, de apariencia digital y en el que los implantes cibernéticos se encuentran a la orden del día. La caracterización de los personajes también es sobresaliente, así como el impacto visual de las contadas escenas de acción que hay. Lo que me impide darle mejor puntuación tiene más que ver con lo que no está, con esa mutilación de la esencia original de la que hablaba. Y es que en esta adaptación la búsqueda e implicaciones de la autoconsciencia por parte de un ente cibernético acaba transfigurada en una tópica y anodina historieta de amor y pérdida. No vaya a ser que hacer pensar al personal no resulte igual de beneficioso para las cuentas de Dreamworks. |

En un japón futurista la joven Motoko Kusanagi (Scarlett Johansson), también conocida como 'the Major' Mira Killian, es la líder de grupo operativo de élite, Sección 9, cuyo objetivo es luchar contra el ciberterrorismo y los crímenes tecnológicos. Al mando de esta unidad de operaciones encubiertas está Aramaki (Takeshi Kitano), y destaca Batou (Pilou Asbæk), un exmilitar considerado como uno de los agentes más salvajes del grupo. Pero, después de un peligrosa misión, el cuerpo de Kusanagi queda dañado, siendo sometida a una operación quirúrgica para trasplantar su cerebro en un cuerpo robótico. Este nuevo cuerpo artificial le permitirá ser capaz de realizar hazañas sobrehumanas especialmente requeridas para su trabajo... Basada en la aclamada saga homónima de ciencia ficción.

No hay comentarios:
Publicar un comentario